Esta Iglesia particular llevó a cabo las Sesiones Sinodales de la Asamblea Diocesana. Durante este importante espacio se reafirmó su trabajo sinodal en las parroquias bajo la dirección de Monseñor Juan Carlos Cárdenas Toro, Obispo de esta jurisdicción eclesiástica. Por tal motivo, el prelado al finalizar la Asamblea de Toma de Decisiones envió una carta al Pueblo de Dios, dando paso al inicio de implementación del Sínodo Pastoral Diocesano. Al dirigirse a todos los ministros ordenados, religiosos, religiosas y laicos de la región, el Obispo indicó que el camino que está recorriendo este territorio desde el Evangelio, llena de sentido la vida y anima a los feligreses a no quedarse quietos, sino a ser misioneros discípulos en camino. De igual modo informó que el trabajo eclesial los ha impulsado a centrar la atención en cada persona, familia, parroquia e institución del territorio diocesano con el objetivo de que cada espacio se convierta en un lugar para responder como creyentes, no con palabras, sino con un paso al frente. Por otra parte, el prelado destacó las diversas fases que está tenido este Sínodo Diocesano, donde las familias de Nariño han tenido un papel protagónico y lo continuarán desarrollando. Finalmente, detalló que las necesidades son muchas en el departamento, sin embargo, las familias, los jóvenes, los niños y los que sufren de múltiples formas de violencia, desplazamiento, depresión, hambre, entre otras realidades, seguirán siendo ayudados por la Iglesia gracias a los sacerdotes y comunidades religiosas desde los templos del territorio.